lunes, 21 de abril de 2008

Ni-co-li-no!!

No soy el más autorizado para escribir de esto; pero el excelente artículo que publicó el doc9 me movió las fibras más íntimas, me hizo acordar de mi infancia y prometí escribir algún recuerdo. Respecto del boxeo tengo pocos pero buenos: vi en directo, vía satélite, una de las mejores peleas de la historia del box, cuando el Negro Galíndez, con el ojo a la miseria, se resistió a abandonar el ring por un cabezazo y noqueó en el último round, bañado en sangre, a Ritchie Kates. Era mayo de 1976 y la dictadura ni siquiera me preocupaba. También una vez fui al Luna a ver una defensa de Santos Benigno Laciar. Creo que fue en el 81 o 82, al Falucho le robaron la pelea, se la dieron al panameño Ibarra y se armó un cachengue de la gran puta, todo el mundo tirando monedas. Si tenemos en cuenta que estábamos en dictadura, tirar esas monedas fue toda una osadía. A esa altura yo no sabía cuánta gente se moría por el boxeo; no conocía a los periodistas que decían que mientras haya miseria habrá boxeo. Simplemente me gustaba ver a dos tipos cagarse a bollos. Hasta que descubrí que en el box también hay arte. Y el artista era Nicolino. Sólo llegué a ver los últimos destellos de este artista incomparable, y me parece el autor de una de las obras de arte más hermosas de la historia. Nicolino tendría que pasar a la historia grande como el inventor de otro deporte, así como los griegos sobrevivieron también por la realización de sus juegos en Olimpia, cuando los deportistas puedan hacer lo que hacía Locche (algún día, dentro de muchos años, lo lograrán) habrá que recordar al adelantado, al único que hacía otra cosa que muchos, erróneamente, llamaron box. Enumerar todas las cosas que hacía el Intocable arriba del ring no me corresponde, sólo algún viejo entendido podrá contar las anécdotas de este tipo. Nicolino tenía cara de vago, de atorrante, caminaba como Chaplin, mientras esperaba que su oponente le tirara la trompada se levantaba los pantalones, o conversaba con el público, o con el jurado, con algún periodista: en el clinch también aprovechaba para descansar y hacer alguna morisqueta a alguno del ring side; otras veces peleaba con una mano y con la otra se apoyaba en la soga. Pero lo más increíble, lo jodidamente increíble, era cuando ponía la cara para que le peguen. Los tipos no sabían qué hacer. Si tiraban el mamporro se exponían a quedar desairados tirándole el bochazo al aire; si no amagaban pegar le hacían el juego a Nicolino quedándose duros, sin saber qué hacer. En fin, ver pelear a Nicolino era un festival para la vista, era divertirse; por suerte Menotti no se dedicó al boxeo si no hubiese inventado "el boxeo que le gusta a la gente". Un grande de verdad, Nicolino; vaya este recuerdo para él. Sé que alguno de los periodistas deportivos que lee este mail (y hablo especialmente de usted, sumbutrule) puede hacer este post mucho más divertido.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Que idolo total, que placer verlo "no boxear". En YouTube se puede ver alguna pelea de Locche, ojala hubiera mas.

Ajenjo dijo...

Llegué atrde a verlo, tanto que solo lo he visto en esos programas donde compilan momentos destacados del deporte. Se de box menos que poco, y aún así, disfruto cada vez que veo alguna filmación de Locche. Mientras leia, recordé a mi viejo, (el si sabia) que pasaba meses esperando las peleas que le interesaban.

slds
A

Aguilucho dijo...

el boxeo no me interesa en lo más mínimo, pero leer un post más o menos bien escrito como este dan ganas de sacar entradas para el Luna Park.

El Doc 9 dijo...

Apenas me aviso mi mentora Dani Quichi, leí atentamente el material este amigo Peralta; Nicolino era el "intocable", una especie del Maradona argentino del box, también esta Monzon, que seria una especie del Ruggeri -ex jugador campeon del Mundo 1986- dentro del pugilismo. Lo felicito Peralta, y como no puedo no cumplir la consigna de est pagina, tengo que decirle que usted tiene ojo boxísitco de re puta madre, y ha visto a muchos en vivio y en directo... tampoco quiero decirle que es un viejo de mierda, jaja, abrazo grande
pd: anímese Aguis, a entrenar al menos, es una gran gimnasia el boxeo

Recetaria dijo...

dejá de mentarme maraca!

DEB dijo...

Concuerdo con el aguilucho, el boxeo no me atrae; es más lo evito activamente. Pero por como pinta en este texto lo que llama obra maestra, arte, etc, etc, del box me dan ganas de buscar un videito del susodicho, para el Luna Park no me alcanza...

Anónimo dijo...

Para completar el cuadro berretón que abunda en este blog, ahora a este tipo se le dio por elogiar a Nicolino, algo así como el colmo del boxeador. Un tipo que sólo puede sobresalir en un país raro como éste. Sólo le falta decir que era Nicolino era mejor que Muhamad Alí y estábamos listos... Y sí, Monzón era superior a Locche y es muy injusto compararlo con Ruggeri... Si Nicolini tuvo éxito con su "estilo", fue porque peleaba con representantes del Lejano Este... O alguna vez se enfrentó a algún aspirante hambriento del Bronx? Dejate de joder...

Anónimo dijo...

16.34, acaso pensas que llego a campeon del mundo(defendio el titulo 6 veces) enfrentando nada mas que japoneses? cuando decis "algun hambriento del Bronx", a que te referis? o pensas que nunca peleo con hambrientos tampoco? a menos que pienses que el unico boxeador bueno era Mike Tyson...

Anónimo dijo...

Peralta, no me peche para que me haga el divertido porque cagamos. Pero si quiere divertirse le recomiendo algo mejor (posiblemente ya lo vio, pero no estoy seguro; no está tan difundido). Búsquese la primera de Nicolino contra Pambelé. La del 71. La buena (en la otra, que perdió, Nicolino estaba entrenado como usted ahora). Si ya la vio, véala de nuevo. En la tele lo atragantan con la del japonés. ¡Estamos podridos de ver el noveno round contra el japonés! Pero cualquiera que mire esta pelea se olvida para siempre de la del japonés. En ESPN la tienen, yo la vi completa ahí. Debe haber algo en Internet, supongo. Y si no mire cuando Hagler lo cagó a bollos a Tommy Hearns.

Anónimo dijo...

Gracias por su aporte, sumbutrule, seguro he visto esa pelea contra Pambelé, y tiene razón con que repiten siempre la de Paul Fuji. La de Hagler cagando a bollos a Hearns fue memorable, pero más memorable todavía fue comprobar el increíble tongo de la primera pelea entre el burro de Mano de Piedra de Durán y Sugar Leonard. En la segunda, cuando pelearon en serio, a Durán le dio tanto miedo que se cagó encima. En dos rounds se comió 321 trompadas, y a todas las vio cuando ya venía la otra.

El Doc 9 dijo...

Permiso, Peralta, pero quiero decirle algo a Ilgrossod; parece que usted mide las cosas como Bilardo, es decir resultado o nada. y Nicolini era mucho mejor técnicamente que Monzon, quien fue un grande, pero muy aburrido verlo. no se me enoje, e, ni me puchere, y en mi Doc 9, recomende y aporvecho la ocasion, entrar a la contratapa del diario Crítica de la Argentina del día 22 0 23 de abril del corriente. salute

El Doc 9 dijo...

Peralton, parece que compartimos la pasion por el boxeo o algo asi; no sea cagon y entre a estos de youtube, o como mierda se llame.
http://www.youtube.com/watch?v=3q6XTGlqQec&NR=1

Ese link abre otros, asi, se practica unos buenos golpes. abrazo grande.

renegado dijo...

Nicolino lo más grande que hubo en el país como boxeador. El arte de la defensa, del esquive, del dejar en ridículo. Mirá que hacer llorar al rival de impotencia. Y acá en la pampa tubimos un discípulo con sus características propias, miguel angel campanino, que la mafia de este deporte no lo dejó llegar a tiempo, y cuando lo hizo lo agarró pipino cuevas y lo mató.